Historia General del Pueblo Dominicano Tomo V

218 /XFKDV SROtWLFDV GXUDQWH OD SULPHUD PLWDG GH OD GLFWDGXUD del Partido Dominicano he puesto la sección de Ornato y Embellecimiento, ampliándose en sus actividades». 72 3RVLEOHPHQWH SRU HVWD FRQIXVLyQ HQWUH 3DUWLGR \ (VWDGR -LPHQHV *UXOOyQ GHÀQH DO 3' FRPR ©XQD RUJDQL]DFLyQ SDUDJXEHUQDPHQWDO TXH FRPSDUWLy FRQ HO DSDUDWR UHSUHVLYR OD IXQFLyQ GH PDQWHQHU HQ SLH DO JRELHUQR \ VROR VH SRGtD ocupar un puesto en la administración pública si se era miembro de él». 73 D ISIDENCIA Y CONTROL POLÍTICO DEL C ONGRESO (O &RQJUHVR IXH XQR GH ORV HVSDFLRV HQ TXH VH H[SUHVDURQ ORV FRQÁLFWRV partidarios, especialmente durante los primeros dos años de la dictadura, HQ TXH WRGDYtD HVWDEDQ SUHVHQWHV ODV IXHU]DV TXH SDUWLFLSDURQ HQ HO JROSH de Estado de 1930. En la medida en que este bloque se resquebrajó, con las salidas de los partidos Liberal y Republicano, su actitud sería completamen- te sumisa y su accionar descansaría en legislar para legalizar la represión y consolidar los mecanismos de continuidad del régimen. A partir de 1932, este poder del Estado se convertiría en instrumento de Trujillo: las leyes y reso- luciones se aprobaban sin ningún tipo de discusiones ni contradicciones, a no ser en cuestiones de procedimiento. Solo en los primeros meses de la Era ²GLFH -HV~V GH *DOtQGH]² FXDQGR WRGDYtD HO &RQJUHVR TXHUtD VHU XQ UHÁHMR GH OD &RQIHGHUDFLyQ GH 3DUWLGRV VH SURGXMHURQ DOJXQDV UHQXQFLDV VLQFHUDV /D IRUPD GH IXQFLRQDPLHQWR GHO &RQJUHVR FRQVLVWtD HQ TXH VH LQWURGX - jeran los proyectos de leyes sin discusión y muchas veces hasta sin que los SURSLRV VHQDGRUHV \ GLSXWDGRV FRQRFLHUDQ D IRQGR OR TXH VH LED D DSUREDU lo que más de una vez trajo divergencias entre congresistas, como sucedió FRQ XQ GLSXWDGR D TXLHQ QR VH OH GLHURQ H[SOLFDFLRQHV \ H[LJLy PiV FODULGDG «¿Acaso no merezco que se me diga de qué se trata? ¿Debo votar inconscien- temente? Yo soy hombre que no produce incidentes y sobre todo cuando las cosas vienen por esa vía. Soy de los que comparten la responsabilidad en cualquier momento, en las cosas que vienen de esa vía. ¿Por qué no puedo yo merecer que se me diga?». 74 Aunque no siempre es posible determinar las posiciones políticas que se GHIHQGtDQ GHELGR D TXH HUD PX\ ULHVJRVR TXH ORV FRQJUHVLVWDV H[WHUQDUDQ VXV SXQWRV GH YLVWD PXFKRV GH HOORV IXHURQ REOLJDGRV D UHQXQFLDU HVSHFLDOPHQWH cuando se acusaba al partido que representaban de estar conspirando o de no apegarse a decisiones sugeridas por el Poder Ejecutivo.

RkJQdWJsaXNoZXIy MzI0Njc3